Demencia discursiva


Siempre he pensado en lo inútil que es el primer post de un usuario de cualquier red social o página web de contacto virtual. Supongo que existe una especie de convención para que todos anunciemos que llegamos, que somos nuevos y que queremos hacer amigos.

Cada vez que abro un perfil en una web, me siento un tanto extraño. Sí, es el mismo sentimiento que me persigue cuando llego a una fiesta y no conozco a nadie y debo presentarme para no dar la impresión de que soy superior a todos (aunque probablemente lo sea) o que soy un tipo con problemas mentales que llegó al sitio por mera casualidad (que quizá se asemeje más a este caso).

Seguir al rebaño es algo que no puedo evitar. Eso sí, de lo que nunca podrán acusarme es de querer parecerme a alguien, de emular comportamientos y hacer pasar por mías las actitudes de otros. Estoy muy intenso para escribir el primer post. No quiero asustarlos. Pues bien, no sé quiénes lean esto, pero henos aquí. Espero que sea grato el tiempo con ustedes.

PS: este blog lo abrí por obligación de una materia en la universidad, pero creo que de ahora en adelante lo utilizaré un poco más.