Perfidia


Hay dos personas que conozco, que no se conocen, pero que se imitan entre sí. Corren en dirección opuesta. Una sube, la otra baja. Buscan tanto lo que quieren  y quieren tanto lo que buscan que, sin notarlo, terminan lagrimando mientras dan vueltas erróneas sobre su propio eje. Sigue leyendo «Perfidia»